
Quizás este más perdida que antes, pero seguro que menos desviada de lo que busco, lo cual no es una contradicción.
Hay preguntas fundamentales que nadan entre mis mares, entre las orillas de mis pensamientos revueltos. Yo quiero mi pequeño cuento donde el príncipe no destiña y la princesa no se odie a si misma, donde se luche por un ideal o algo bueno posible de ser cierto.
