Aún no puedo parar,
aún no llegue a la meta,
todavía no empecé,
no veo la cima...
la imagino en fotogramas...
Aún no puedo descansar,
no he podido alcanzar el escalón,
soy un enano sin paraguas.
Soy diminuta,
soy pulgarcita y caperucita rosa...
Aún no hay camino entre las matas.
Estoy cogiendo fuerzas con un fuelle con fuga.
Siento la cana tras la nuca
y la pena entre los mechones.
Soy un adolescente viejo,
una niña sin libros de historias.
Es una carrera con los ojos cerrados.
No puedo parar,
y estoy perdida.
Cansada,
ando y no avanzo.
y no tengo tiempo para nada más:
andar, andar y sentir el peso de los pasos inconexos.
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