22 abr 2020

Vértices V

Tocarnos como un lujo,
sentirnos como una odisea,
entendernos como una súplica...

los días se suceden raros,
en una cosa intermedia
entre el llanto, la paz, la plegaria,
la belleza del silencio

Nunca la palabra fue tan divina,
como la compañía que sustituye
a la materia
y, sin embargo, tan mal usada...
tocarnos,
sí, tocarnos con ganas,
con sentimiento,
sin decir nada...
Hablar suple al tacto,
pero no lo suple,
y si al menos hablaras mejor,
nomás con más tino,
no con más razón
(empatía, antipatía, me quiere, no me quiere)
y a veces tan orgiástico el silencio en la mirada

A veces siento que la locura está a punto de llegar como la tormenta

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 Entre las piernas,
entre los las sienes,
entre los dedos de los pies,
se desmembra un sentimiento que no quiero,
no más que esconderlo debajo de la alfombra,
detrás de la cortina...

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 ¿Sabes?
odiaba la mañana,
ahora odio la noche porque me falta el aire,
hay una losa sobre el pecho
y al inspirar suena el fuelle gastado,
me oprime y siento que me ahogo...
y sé que es mental
aunque el pensamiento no esté aquí,
sé que es la sombra,  la negrura
cuando el añil se oscurece y se filtra por los poros

18 abr 2020

Estrellitas

Quería que dejaran de estar rotas,.
Ya no están rotas pero tampoco enteras...
Ahora las entiendo del todo, no dudo que seguirán cambiando de significado...

17 abr 2020

Spoiled

En medio de la cueva,
pero no es una cueva...
Hay un silencio que vibra...
O un tono difícil de percibir,
hay muchas palabras 
unas encima de otras,
unas encima de las otras, 
Encima... 
hay mucho movimiento.
En ese pitido inaudible
no hay mensaje,
sólo un aroma que se pega y mancha.
Se luce bonito con una capa de frecuencias pringosa.
Estate seguro de que nadie lo vera,
aunque quizás nadie te toque,
quizás el baile empiece a su hora en el salón de gala.
Es un castillo
con goteras en el interior
y cada gota al tocar el suelo
reverbera como una caverna.
En medio de la gruta
que no es una gruta,
la princesa gime desagradecida,
se queja inmadura y solitaria,
susceptible, exagerada.
La princesa no sabe hacer nada,
¿por qué llora la princesa?
¿Visteis  los cortinajes y su parsimonia?
Es una niña malcriada...
pues que crezca y que olvide... 
¿no tiene espacio para bailar y cantar...?
A solas en sus metros cuadrados.


En el horizonte hay un cielo de azufre,
hasta huele mal, si te acercas, 
si te acercas, 
y es pegajoso,
si tocas...
y suena como una onda que no para,
si escuchas

Hay gente que solo saber quejarse

2 abr 2020

Ven y siéntate

Sobre el tapete rojo del sillón
se acumula una densa lava
de ambar y miel.
Blanda y espesa,
dorada, con burbujas,
que va extendiéndose hasta el borde del mueble.

Dulce, instantáneo,
lento y fugaz,
mancha todo alrededor
desde la base hasta el pie.
La silueta dura
se va untando de la pomada azucarada
y adquiere un olor y un sabor distintos.

Tiro pétalos de margarita encima
y se quedan pegados
como si fueran cosidos a un vestido.
Arrojo partes de rosas y claveles aún sin ajar
y el perfume lo invade todo.
Lanzo flores sobre el trono
con los ojos cerrados
y mordiendo los labios.

El cuerpo carmesí brilla a la luz
y parece ahora
vino, chocolate y oro
con virutas de vainilla y fresa.
Es su sabor
quizás algo exagerado
y su textura espesa y pegajosa,
demasiado para la ingesta,
pero además
el sillón está hecho
de materias
que podrían lastimar la piel.

(From papeles perdidos, 2005)

1 abr 2020

Ramas

Tengo brazos como ramas,
a veces se enredan sobre el aire,
dan cobijo al viajero extraño
o de ellas se descuelga la vida.

Pero, otras,
cuando te abrazo,
son raquíticas varas que se tronchan
y astillan,
que se parten y caen muertas,
por cansancio y por desgaste.

Tengo brazos como ramas
y el corazón de resina...

Mis raíces están secas
de beber de ti y no hallar nada,
raíces que se agarran a quien sea
y que con poco que reciban
alimentan el tronco.

El tronco está lleno de huellas
de quien se va sin mirar atrás,
y de quien abrazó haciéndonos más sabios,
pero también lleva las marcas de tu amor,
de tus zarpazos,
arañazos sobre el torso delgado que acoge al corazón...
Lloro en naranja...

Tengo brazos como ramas
y el corazón de resina...

Frondoso es mi pelo,
pero ya con poco misterio.
Espero
y fuerte como un nido o una cuna.
Tú metías tus manos
y lío tras lío lo alborotabas
y lo que era cama conviertes en ruina,
en trampa.
Frondosa era la copa que lastimas

Tengo brazos como ramas
y un corazón de resina

(FRom papeles perdidos 3.11.06)